22.9.17

Emily Dickinson. 205

Ven despacio, oh Edén!
Labios a ti no usados,
tímidos, saborean tus jazmines
como lánguida abeja

que hasta su flor llegada con retraso
suma en torno del cáliz,
cuenta néctares, entra 
y se pierde en su aroma.




En "Carta al mundo"
     

No hay comentarios: