esa inocente mamá florida,
esa mantequilla en el cañón de un revólver.
Apriete el gatillo. PUM!
Un ranúnculo contra el sol
Ningún poema borrará procesos
o destituirá senadores o hará honrados a los jueces.
Si tú y yo
y todos los poetas del mundo
escribimos poemas sin cesar
no detendremos ningún cáncer.
Ninguna bala deshará su camino
para herir a quien disparó,
y sin embargo sé
que el mundo no es culpa de Dios
sino nuestra.
Escribimos poemas
como las hojas dan oxígeno:
para poder respirar.
De "Al filo del cuerpo"
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